PODOFILIA: MÁS QUE UNA LAMIDA DE PIES
La podofilia es una atracción sexual hacia los pies y se considera una forma de parafilia. En cuanto a los hombres que experimentan atracción hacia los pies, es importante recordar que cada persona es diferente y tiene sus propias preferencias sexuales.
¿Cómo decirle a tu pareja que te excitan los pies?
La primera recomendación es que seas sincero sobre tus preferencias y se lo cuentes con toda tranquilidad. Aunque corras el riesgo de que no lo entienda al principio, la honestidad es vital en todas las relaciones.
¿Cómo iniciarse en el mundo del fetichismo de los pies?
Existen varias cosas que puedes probar para ver si ambos están en esto de la podofilia. Veamos algunos ejemplos:
Pedicura o lavado de pies: A algunos les pueden sonar muy mal, pero es una forma de comenzar en el tema, consiguiendo además unos pies limpios y pulcros.
Enviar fotos de los pies: Una curiosa forma de divertirse y ponerse a tono es esta inocente versión de los nudes en los que solo aparezcan tus pies.
No obstante, cuidado si abres estas fotos en público. Aunque no resulte tan escandalosa como una foto de un desnudo, si alguien se entera de que te estás enviando fotos de los pies con tu pareja puede resultar “raro”.
Masaje: Un masaje en los pies, además de resultar tremendamente relajante, puede ser un paraíso para un fetichista de los pies.
Besos en los pies o chupar los dedos: Sube un poco más la temperatura con estos juegos que pueden resultar increíblemente excitantes.
Masturbación con los pies: A la mayoría de personas con fetiche de los pies les encanta frotar sus genitales con unos pies de vez en cuando: masturbar con los pies, introducir el dedo gordo por el ano, etc.
Hay que tener en cuenta, sin embargo, que los pies son mucho menos hábiles que las manos, por lo que se requiere de un cierto periodo de aprendizaje.
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